Aquí mostramos unas fotografías con el periódico del día para confirmar que continuamos vivos.
Ninguna de las mentes malignas pide rescate, simplemente desean desaparecer durante el mayor tiempo posible.
Posdata de mente maligna de picadura malandra: durante el secuestro van a ser sometidos a beber cerveza, comer chuletón de ternera, beber cerveza, no poder salir de una suite con jacuzzi en algún lugar del norte de Cáceres y relacionarse con fauna autóctona de bares de la zona.